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El 20 de noviembre de 1970, un colectivo sobrecargado cayó al agua desde el puente de Arroyo Leyes, dejando 54 víctimas fatales. Hoy, el hecho sigue vivo en la memoria colectiva.
Hoy se cumplen 54 años de uno de los accidentes más trágicos en la historia de Santa Fe y del país. El 20 de noviembre de 1970, un colectivo de la empresa Helvecia que viajaba desde Santa Fe hacia San Javier cayó desde el puente de Arroyo Leyes. De las 60 personas a bordo, 54 perdieron la vida, muchas de ellas niños que regresaban de la escuela.
El colectivo había partido de Santa Fe a las 18 horas. Cargado con pasajeros, el vehículo se desplazaba por la Ruta Provincial 1 cuando, al llegar al puente de Arroyo Leyes, el conductor perdió el control. Según los testimonios, el autobús chocó contra la baranda y se precipitó al agua a las 18:43.
A pesar de la experiencia del chofer, el siniestro evidenció los riesgos del sobrepeso y la falta de infraestructura adecuada en el puente, factores que contribuyeron a la magnitud de la tragedia.
EL PUENTE DE LA TRAGEDIA, UNA INFRAESTRUCTURA MARCADA POR EL TIEMPO
El puente original, construido en 1942, era una innovación para su época, con un diseño de viga hueca de hormigón armado. Ubicado a 36 kilómetros al noreste de Santa Fe, tenía una longitud de 182 metros y estaba dividido en tres tramos. Sin embargo, con el paso de los años, el puente se ha ampliado a 235 metros para enfrentar la erosión de las márgenes del arroyo.
RECUERDOS Y TESTIMONIOS QUE EMERGEN DEL PASADO
La tragedia dejó huellas profundas en la memoria de la comunidad. Durante décadas, el dolor y el silencio dominaron las conversaciones sobre el accidente, pero los testimonios finalmente comenzaron a aflorar. En 2020, se publicó el libro El Puente de las Ánimas , de Gustavo Farabollini, que recopila historias y detalles del siniestro.
El título hace referencia a las numerosas vidas que se apagaron aquel día y al recuerdo perenne de quienes estuvieron allí. El trabajo de Farabollini resalta no solo los hechos, sino también la resiliencia de una comunidad marcada por la pérdida.
UNA LECCIÓN HISTÓRICA PARA LA REGIÓN.
La tragedia del Puente de Arroyo Leyes es un recordatorio de la importancia de garantizar infraestructuras seguras y adecuadas. Aunque el puente sigue siendo un corredor vital para la región, su estado actual subraya la necesidad de inversión para prevenir incidentes futuros.
A 54 años del accidente, la memoria de las 54 víctimas sigue viva, y el puente de Arroyo Leyes permanece como un testimonio silencioso de una tragedia que jamás será olvidada.