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La Cámara baja tratará los proyectos que ya cuentan con media sanción del Senado y que buscan modificar la distribución de los Aportes del Tesoro Nacional y del impuesto a los combustibles. La oposición asegura tener quórum y mayoría para aprobarlos.
La Cámara de Diputados se prepara para una sesión clave este miércoles, en la que se debatirá la reforma de la distribución de los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) y del impuesto a los combustibles, proyectos impulsados por los gobernadores y ya aprobados en el Senado. La oposición afirma contar con los votos necesarios para convertirlos en ley.
El temario de la jornada, solicitado por Unión por la Patria, Democracia para Siempre y Encuentro Federal, incluye además el tratamiento de los vetos presidenciales a las leyes de movilidad jubilatoria y de discapacidad, la reforma del Régimen Penal Tributario y la puesta en marcha de la comisión investigadora sobre el Caso Libra.
Los bloques opositores organizaron el orden de la sesión de modo que los primeros temas a tratar sean los vetos y que la discusión sobre el impuesto a los combustibles se ubique al final de la agenda.
Diferencias en torno a los ATN
El dictamen de mayoría que respalda el texto aprobado en el Senado establece que los fondos de ATN se distribuyan automáticamente según los índices de la ley de coparticipación federal, integrándose a la masa coparticipable. En cambio, el dictamen de minoría, apoyado por el oficialismo y algunos gobernadores aliados, sostiene que los ATN deben seguir utilizándose de manera discrecional para emergencias, distribuyendo solo el remanente bajo el esquema de coparticipación.
La discusión también refleja la fractura dentro del bloque de gobernadores, ya que dirigentes como Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Leandro Zdero (Chaco) y Marcelo Orrego (San Juan) acompañaron la propuesta del oficialismo.
Cambios en el impuesto a los combustibles
Respecto a la reforma en la distribución del impuesto a los combustibles, el proyecto de mayoría propone eliminar los fondos fiduciarios y establecer un nuevo reparto: 14,29% para el Tesoro Nacional, 52,02% para las provincias y 28,69% para el Sistema Único de Seguridad Social.
De ese porcentaje destinado a las provincias, un 25% se distribuiría en partes iguales entre todas las jurisdicciones y el 75% restante de acuerdo con los índices de coparticipación. Actualmente, las provincias reciben apenas el 10,4%, mientras que el Tesoro Nacional se queda con el 24,29% y la Anses con el 28,69%, además de financiar con parte de lo recaudado a diversos fondos fiduciarios, que serían eliminados.
Por su parte, el dictamen de minoría del oficialismo mantiene el 28,69% para la Anses, y propone repartir el resto bajo la ley de coparticipación, lo que dejaría cerca del 30% de los recursos en manos del Gobierno Nacional y un 41% para las provincias.
La votación de ambos proyectos parece asegurada, aunque en la oposición reconocen que no alcanzan los dos tercios necesarios para rechazar un eventual veto presidencial.