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La aeronave de matrícula boliviana fue seguida desde su ingreso al espacio aéreo argentino hasta su aterrizaje cerca de Rosario. El ministro Petri destaca el operativo como el «más importante y exitoso» en la historia del país.
En un operativo inédito que involucró a la Fuerza Aérea Argentina, el Comando Conjunto Aeroespacial y la Gendarmería Nacional, una avioneta con matrícula boliviana fue interceptada y hallada en las cercanías de Rosario con 480 kilos de cocaína en su interior. El seguimiento y la interceptación comenzaron el miércoles pasado luego de que el radar de Tostado, en Santa Fe, detectara su ingreso irregular al espacio aéreo argentino.
El ministro de Seguridad, Luis Petri, subrayó en conferencia de prensa esta mañana la magnitud del despliegue, calificándolo como “el operativo más importante y más exitoso que registre la República Argentina”. Según explicó Petri, la operación estuvo respaldada por instrucciones precisas del presidente Javier Milei, quien promueve una «lucha sin cuartel contra el narcotráfico». El ministro detalló que “la Fuerza Aérea Argentina, el Comando Conjunto Aeroespacial y la Gendarmería Nacional trabajaron de manera coordinada en una operación compleja que no tiene antecedentes en el país”.
Persecución y aterrizaje forzoso
El operativo inició cuando el radar de Tostado identificó un “eco” aéreo irregular a 40 kilómetros al noreste de su ubicación. A partir de ahí, se desplegaron dos aviones tucanos desde Reconquista para interceptar la aeronave, una Cessna 206 de origen boliviano. La persecución aérea duró más de dos horas y contó con maniobras disuasivas para forzar el aterrizaje, dado que la avioneta no respondía a las órdenes de las fuerzas de seguridad.
Petri indicó que “la aeronave en ningún momento fue colaborativa”, y destacó que en algunos tramos del vuelo el piloto redujo la altura a solo 10 metros para evitar ser interceptado. Finalmente, la avioneta aterrizó entre las localidades de Luis Palacios y Andino, en el departamento San Lorenzo, donde fue encontrada sin ocupantes y con la carga de droga en su interior.
Vinculación con bandas narco de Rosario
Según fuentes de Gendarmería, el operativo podría estar relacionado con una organización narco de Rosario cuyos líderes permanecen prófugos desde el operativo “Cosecha Blanca” de 2022. Esta banda, con experiencia en vuelos irregulares desde Bolivia, habría utilizado avionetas para el transporte de cocaína desde la región amazónica hasta el sur de Santa Fe.
Investigaciones previas señalan que la estructura narco, además de gestionar vuelos clandestinos, lavaba dinero en Rosario y localidades aledañas a través de la compra de taxis, franquicias en medios de comunicación, agencias de autos, bares, y propiedades inmobiliarias. La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, confirmó que la carga hallada en la avioneta alcanzaba los 480 kilos de cocaína.
Coordinación y resultados de la estrategia de interceptación
Para el éxito del operativo, las fuerzas de seguridad utilizaron un sistema de “Tránsitos Aéreos Irregulares” (TAIs), creado en conjunto por el Ministerio de Seguridad y el Comando Aeroespacial en marzo de este año. “Se han modificado las frecuencias, modalidades y emplazamientos de las aeronaves para evitar que los vuelos irregulares predigan las rutas de interceptación”, explicó Petri. Además, destacó una disminución del 24% en los TAIs durante el año y un aumento del 33% en la efectividad de interceptaciones.
El ministro enfatizó que este operativo es una muestra de “un cambio de rumbo en la lucha contra el narcotráfico”, impulsado desde la asunción de Milei el 10 de diciembre del año pasado.
“Estamos viendo resultados en Rosario y en todo el país”, concluyó Petri, subrayando que la lucha “sin cuartel” está logrando avances significativos en la reducción de vuelos clandestinos y el tráfico de drogas en Argentina.