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Un escándalo sin precedentes lo que ocurrió en el debut de la Selección Argentina Sub 23 en los Juegos Olímpicos París 2024. La Albiceleste perdía por dos goles de ventaja por un doblete de Soufiani Rahimi en el Estadio Geoffroy-Guichard. Giuliano Simeone marcó el descuento y Cristian Medina sentenció el empate en el minuto 60 del segundo tiempo después de que el árbitro adicionara 15 minutos de descuento. Por incidentes provocado por los marroquíes, el juego se interrumpió durante dos horas, pero los jugadores volvieron al campo de juego, el VAR anuló el tanto de la igualdad y los de Javier Mascherano cayeron por 2-1.
En un primero tiempo sin emociones, el equipo de Javier Mascherano probó en los pies de Thiago Almada, con la presión de Lucas Beltrán y Julián Álvarez, pero sin generar situaciones de riesgo. Del otro lado, el combinado africano tampoco lograba lastimar pero, cuando parecía que el primer tiempo terminaba igualado sin goles, Ilias Akhomach metió magia con un taco fenomenal para Achraf Hakimi, que llegó al fondo y metió el centro bajo para la aparición de Rahimi, que la empujó al gol.
En el arranque del complemento, otra vez Akhomach complicó por derecha, se metió en el área a pura gambeta y el árbitro cobró penal tras un leve empujón de Julio Soler. Rahimi se hizo cargo de la ejecución, se la cruzó a Gerónimo Rulli y sentenció su doblete para estirar la ventaja. Rápidamente, Argentina encontró respuesta y llegó al descuento a través de Simeone, que había ingresado minutos atrás, tras un remate de Soler que llegó a desviar en el segundo palo.
A partir de ahí, los del Jefecito fueron con todo en búsqueda del empate, que llegó en el minuto 60 (sí, 60) del segundo tiempo: Thiago Almada sacó un potente remate que el arquero desvió, posteriormente dos travesaños, primero por un bombazo de Nicolás Otamendi y luego tras un cabezazo de Bruno Amione, pero la pelota le quedó en la cabeza a Cristian Medina, que estableció la agónica igualdad.
Sin embargo, ahí arrancó el escándalo. Hinchas marroquíes tiraron una bomba de estruendo en el sector del banco de suplentes y muchos invadieron el terreno de juego, por lo que los futbolistas se retiraron a los vestuarios. La seguridad retiró a los hinchas, pasaron dos horas y los protagonistas debieron regresar a la cancha ya que el juez finalmente anuló el gol de Medina por un offside previo de Amione. El juego se reanudó por solamente 3 minutos y con entrenamientos precompetitivos de 10. Por supuesto, la Albiceleste no tuvo tiempo y cayó por 2-1.
Insólito por donde se lo mire. Un papelón sin precedentes. Después de dos horas del gol de Medina, el árbitro revisa en el VAR en un estadio sin público (estuvo lleno durante el tiempo normal del partido) y después lo reanuda solo 3 minutos. Tampoco tiene tanta explicación los 15 minutos de adición en el encuentro. Realmente es un todo inexplicable.
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