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«¡Aquí nadie se rinde! El martes la calle les va a mostrar que no van a poder con el pueblo”, convocó Yasky a través de las redes.
El Frente Sindical -que reúne al moyanismo y la Corriente Federal- y la CTA de los Argentinos, se preparan para salir a la calle este martes. Con el aniversario de la muerte de Evita como disparador, expresarán su decisión de mostrarse activos contra los sectores económicos que impulsan la devaluación y los remarcadores de precios. A estos gremios se sumaron organizaciones sociales alineadas con la figura de Cristina Kirchner, como la Fetraes, la Confederación Nacional de Cooperativas de Trabajo y la Corriente Martín Fierro, entre otras.
La movilización ganó cuerpo en medio de la corrida del dólar, su traslado a los precios del mercado interno, y la ausencia de anuncios sobre un refuerzo de ingresos para los que menos tienen y los lentos tiempos de la CGT, que puso fecha para dentro de un mes -el 17 de agosto- a su protesta.
También busca marcar un perfil político más definido que el llamado cegetista. ”Evita nunca dudó en enfrentarse a los poderosos para defender los derechos de los humildes”, señaló la CTA en la convocatoria a manifestarse. Y su titular, Hugo Yasky, remarcó en sus redes: «Donde hay una necesidad hay un derecho. Ahora quieren que renunciemos al legado de Eva. ¡Aquí nadie se rinde! El martes la calle les va a mostrar que no van a poder con el pueblo”.
Poco antes, La Bancaria –el gremio que lidera Sergio Palazzo–, aseguró que el plan de pagos acordado con el FMI se volvió “inviable”, “a consecuencia de sucesivas crisis de las que no somos responsables”.
También habló Pablo Moyano, que le pidió al presidente Alberto Fernández que tome medidas “más fuertes”. El dirigente dijo este domingo que hay “un ataque de la derecha” que quiere “voltear al Gobierno” para imponer sus políticas: “reforma laboral, previsional, todo lo que le quite derechos a los trabajadores” . Y apuntó contra el Grupo Clarín, el diario La Nación, el Poder Judicial, la empresa Bunge & Born, y la Asociación Empresaria Argentina (AEA), al considerar que los empresarios «permanentemente remarcan precios y llevan adelante políticas para tratar de seguir devaluando».
Ese será, entonces, el tono de la marcha de antorchas. La movilización saldrá a las 17.30 desde Independencia y la 9 de Julio hasta el ministerio de Desarrollo Social, donde están los emblemáticos murales iluminados de Evita.
La CTA de los Argentinos pone el acento en lograr “la unidad del campo popular en la calle”. “El único antídoto frente a los que buscan quebrar las esperanzas con las que en 2019 elegimos un gobierno popular es el pueblo movilizado”, subrayó en un comunicado.
Otros detalles del acto terminarán de ser definidos este lunes, en una reunión de Moyano con las organizaciones.
La UOM
En coincidencia con la lectura de Yasky y de Moyano, el nuevo titular de la Unión Obrera Metalúrgica, Abel Furlán, denunció que «hay sectores formadores de precios monopolizados de la alimentación y de otras industrias» que procuran «desestabilizar» al Gobierno con «corridas financieras y suba de precios».
Furlán convocó a la marcha de la CGT del 17 a agosto. “Estoy convencido de que acá hay sectores de poder que quieren desestabilizar al Gobierno, que quieren someter al Gobierno a un ajuste, lo que para nosotros es algo impensado en un contexto donde la Argentina tiene más de un 40 por ciento de pobres”, señaló.
Sobre quiénes están detrás de la desestabilización, el dirigente contestó que “hay sectores formadores de precios monopolizados de la alimentación o de otras industrias que hoy presionan para una devaluación. Esto lo vemos todos los días; todos los días presionan para una devaluación y nosotros debemos manifestarnos en contra de esos sectores, tenemos que salir a repudiar a esos sectores. No se puede convalidar que haya un sector minoritario que por el solo hecho de manejar el poder en la Argentina someta a las grandes mayorías populares”.
El miércoles
La Unidad Piquetera, por su parte, movilizará el miércoles 27, en reclamo al gobierno de un bono de 20.000 pesos, la universalización de los programas sociales, el aumento del salario mínimo, la criminalización de las organizaciones piqueteras y por la creación de trabajo genuino.
El titular del Polo Obrero, Eduardo Belliboni señaló que la marcha irá a la Plaza de Mayo, “contra un ajuste que golpea por igual a los barrios y a los trabajadores”.
La protesta será sólo de las organizaciones de la izquierda. Si bien la Unidad Piquetera y la UTEP tuvieron conversaciones para hacer frente común contra la judicialización de sus militantes, y la semana pasada realizaron actividades juntas -básicamente, dirigentes de uno y otro sector participaron en las marchas del otro-, los reclamos de fondo seguirán por carriles separados. Los programas de la Unidad Piquetera y de la UTEP, así como sus posiciones frente al gobierno nacional, tienen enormes diferencias y la confluencia posible es sólo en términos de frenar las ofensivas judiciales.