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«Por segundo año consecutivo no hay presupuesto nacional y se ha decidió que no haya, nunca fue prioridad» sostuvo Enrique Mammarella, rector de la Universidad Nacional del Litoral.
En consecuencia, se depende fuertemente «de las decisiones políticas, y mes a mes ver cómo va a ser nuestro mes, y fundamentalmente a mes vencido».
El complejo panorama de un presupuesto reconducido, «implica que los créditos presupuestarios vuelven a entregarse a las entidades que los ejecutan, en nuestro caso lo hace la Secretaria de Educación, que a nosotros se nos asigna mensualmente la cuota. Entendemos que va a haber un respeto de los gastos del año pasado, pero no tenemos la certeza de que eso este escrito en una resolución».
Es así que la UNL debió «redoblar esfuerzos» y tomar una serie de decisiones durante el año que llevan a mejorar sus gastos, con acomodamientos internos como el desprenderse de alquileres a nombre de la Universidad.
«Estamos trabajando fuertemente en el esquema que nos permite seguir abiertos» enfatizó el rector.
Por otro lado, recordó que «estuvimos casi vegetando en ciencia y tecnología» pero que ahora van a avanzar con financiamiento de algunas líneas por parte de la propia universidad, de provincia y buscando socios estratégicos.
Asimismo remarcó que existe un riego muy grande «con algo muy importante que son los recursos humanos».
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