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El municipio comenzó a recuperar el espacio de los balnearios de la costanera de la ciudad. Trabajan con maquinarias en las playas y esperan ayuda del Ejército.
Con la bajante extraordinaria que perduró por más de tres años, la laguna Setúbal cambió su fisonomía. El paisaje costero santafesino se copó de vegetación y el acceso al agua quedó inaccesible.
A finales de octubre pasado el río comenzó a recuperar notablemente su nivel y las condiciones están dadas para poder recuperar el acceso a la laguna desde la orilla. Con esta intención, el gobierno municipal inició las tareas para recuperar este espacio público. Es por ello que desde el pasado fin de semana las máquinas trabajan en la costa para erradicar la densa vegetación que fue ganando lugar desde la bajante, para que de esta manera el lugar quede accesible.
“La idea es poner en valor toda la parte de los Espigones que se está utilizando mucho por la crecida del río, ya que la costanera Este quedó con una playa corta”, comentó Guillermo Ferrero, secretario de Gestión Urbana y Ambiente del municipio, en diálogo con El Litoral.
Ferrero destacó que “hace muchísimos años que no se trabajaba en el área y actualmente con maquinaria de mantenimiento vial con motoniveladoras y retropalas para recuperar el lugar. En estos días tenemos reuniones con el Ejército para que dé una mano para retirar los camalotes (embalsados que están en los pilotes) y veremos de sumar la parte de los Espigones para hacer la limpieza”.
Al ser consultado si la intención es poner boyado para que el acceso al agua esté permitido, el funcionario indicó que “vamos a depender de lo que pueda hacer el Ejército porque nosotros no contamos con embarcaciones que puedan hacer ese trabajo. Mientras tanto nosotros vamos poniendo en valor toda la zona con cooperativas que se encargan de la parte de higiene y otra con el desmalezado del lugar”.
En estos días también se vio el trabajo de los guardavidas, quienes desde una lancha sacan a mano la tapia que se formó por los camalotes que van quedando atrapados. “Los guardavidas tienen muchas ganas de recuperar el lugar porque se ve afectada su área de trabajo y si está en condiciones la playa se facilita su labor por lo cual permanentemente están sacando camalotes, pero no van a tener gran incidencia, por eso es que necesitamos de la mano del Ejército”, remarcó.
Bosques nativos
Durante la gestión municipal anterior, con la bajante aparecieron zonas con una gran cantidad de especies de árboles como alisos, ceibos, sauces, entre otras. La Municipalidad en su momento decidió delimitar y preservar esos sectores, catalogándolos de “bosques nativos”.
Incluso en este sentido se colocó un cartelería en el que se reflejaba: “Aquí está naciendo un bosque. Este paisaje contiene árboles que pueden formar un bosque. Es un ecosistema en estado inicial que se está desarrollando. Por eso es central que lo cuidemos entre todos”.
Al respecto, el actual secretario de Gestión Urbana y Ambiente señaló: “Entendemos que muchas familias van a disfrutar los Espigones como una playa y no puede haber víboras o arañas que pueden terminar dañando la salud de algún vecino. Por eso nos parece importante comenzar con los trabajos de limpieza”.
Deportes náuticos
Durante el fin de semana cuando se conocieron imágenes en redes sociales de los inicios de los trabajos, la decisión fue bien recibida por la comunidad náutica que tiene como base la zona de los Espigones, sobre todo aquellos que realizan la disciplina de kitesurf. “Nos llegaron un montón de mensajes de agradecimiento de parte de asociaciones y personas que utilizan a diario la zona ya sea con piraguas o kitesurf”, valoró Ferrero.
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