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Representantes de la Cámara Santafesina de Servicios Turísticos (CASASETUR), ante los cortes reiterados de luz en la zona de la Costa Santafesina piden soluciones a la EPE. Por tal motivo viajaron a la ciudad de Santa Fe para entrevistarse con el Defensor del Pueblo, Jorge Henn, y funcionarios del organismo provincial a fin de solicitar su inmediata intervención ante la Empresa Provincial de la Energia.
Como resultado del encuentro, Jorge Henn envió una nota al gerente general de la prestadora del servicio eléctrico provincial en la que le solicita informe si se están previendo planes de obras para superar las contingencias y pide un pormenorizado informe sobre su implementación “en caso de ser afirmativo”. Es decir, si esos planes existen, si se están ejecutando y cuándo, cómo y dónde.
La recurrencia de las interrupciones en el suministro eléctrico en pleno desarrollo estival para los emprendimientos turísticos que se encuentran en los departamentos de la Costa Santafesina, en el corredor turístico de la Ruta Provincial Nº 1, provocan un daño grave en los meses de febrero y marzo, a las expectativas de recuperación económica (que se viera afectado por la pandemia), generando quejas e incluso cancelaciones o pedido de devolución del dinero pagado.
“Entendemos, por lo que nos explicaron los empresarios, que la actividad turística (cabañas, paseos de pesca, caza, y complejos de relax) mostró un enero a capacidad llena, pero si la EPE no estabiliza de inmediato el servicio pone en riesgo el segundo mes de la temporada alta y con ello la posibilidad de reactivar un segmento del que dependen muchas familias. Por ello es que le pedimos a la empresa que nos informe que están haciendo para responder este reclamo de los empresarios, inversores y emprendedores nucleados en esta Cámara”, precisó el Defensor del Pueblo.
CASASETUR se queja de que muchos turistas debieron abandonar sus cabañas al tornarse insoportable la residencia afectada por la interrupción de la energía eléctrica y las temperaturas extremas registradas en enero. A lo que, además, hay que sumar los daños que los cortes sorpresivos o las variaciones de tensión generan en instalaciones y artefactos de uso.